Escrito por jaime gil,
jueves 22 de marzo de 2018 , 17:25 hs
La mañana era fría y amenazaba lluvia pero todos estábamos ilusionados con la visita.
En la Plaza de Anaya nos esperaban el trenecito y Mabel, nuestra guía ,que tiene cuerda para rato. Iniciamos el recorrido contemplando nuestras majestuosas catedrales, conociendo su edad y otras curiosidades. Pasamos por delante de la casa de La Latina de camino al Campus.A los pies de la muralla por San Vicente,empezamos el recorrido por la ribera del Tormes, que venía crecido con las últimas lluvias ,como el regato del Zurguén. Conocimos secretos del viejo Puente Romano,el verraco y del joven Lázaro.
A la izquierda nos impresionaba Tentenecio y San Juan de Sahagún,y un poco más allá,las coloristas vidrieras de la Casa Lis.
Pasamos por delante de San Polo, por debajo del puente de San Esteban, junto a la rotonda del Convento de las Dueñas, vimos cómo se abre la Gran Vía a la derecha.
Colón seguía con el dedo en alto; al subir por Palominos, nos esperaban la Clerecia y la Casa de las Concha. Una vez a pie, contemplamos la fachada del Domingo de Ramos y A pie, aprendimos acerca de astronautas, helados y animales, después, fachada principal.Vaya frío!
En la Universidad, comprobamos que la Rana sigue allí, qué significa, y qué es el Plateresco.Se pasó el tiempo volando, debíamos regresar. Dispuestos e ilusionados con la próxima salida.